NYC & Company es la organización oficial de turismo encargada de difundir y promocionar la imagen de la ciudad de Nueva York, y recientemente estrenó un nuevo diseño de identidad, todo esto bajo la lupa de su directora creativa Emily Lessard.
El amplio trabajo realizado, abarca diversas submarcas, que suponen numerosas aplicaciones, acorde a la intención de renovación y vanguardia que se quería lograr. Según Lessard, el reto ha sido conseguir una coherencia gráfica que le diera sentido a todo el conjunto, teniendo en cuenta además que la ciudad de New York tiene cinco distritos, con personalidades muy potentes y diferentes entre sí.
Esta nueva imagen fue creada desde cero y está compuesta por la creación de logotipo, iconos, tipografías, piezas audiovisuales promocionales, web, entre otros, reflejando con ellos la diversidad y el movimiento tan característicos de New York.
Algo curioso de este rediseño de imagen, es que a pesar de que los colores corporativos principales son el “amarillo taxi” y el negro, en la nueva imagen han usado también diferentes colores vivos y brillantes que buscan representar algunos de los monumentos e iconos de la ciudad, por ejemplo el naranja ‘Staten Island Ferry’ o los dos tonos de verde de la ‘Estatua de la Libertad’. Además, se añadieron ciertas texturas como trama de las serigrafías de Andy Warhol o las que imitan a las luces de Broadway.
Con respecto a la fuente, la organización explica que New York merece tener una propia, por lo que crearon la NYC Sans y NYC Block, inspiradas en la esencia gráfica y arquitectónica de Nueva York. La primera está basada en el diseño de branding de los años 70 que Massimo Vignelli diseñó para el metro de Manhattan; fue dibujada por Jeremy Mickel y Nicholas Sherman. NYC Block está basada en la geometría del logo en bloque de NYC y fue dibujada también por Jeremy Mickel.
Lo cierto es que, según Emily Lessard, “El resultado es moderno –siempre cambiante– pero a la vez familiar y nuevo. Pasarán muchos años antes de que su uso se vea agotado: hay más de 4.000 maneras diferentes para componer ‘New York City’”.